"Un prejuicio es el proceso de formación de un concepto o juicio 
sobre alguna cosa de forma anticipada. En términos psicológicos, es una 
actividad mental inconsciente que distorsiona la percepción"
Los 
prejuicios son inherentes al ser humano. Todos los sufrimos, en mayor o 
menor medida, y es fruto del desconocimiento o rechazo a diferentes 
realidades que se dan en la sociedad. Suele manifestarse como una 
opinión positiva o negativa sobre un determinado grupo y la atribución de
 que posee las cualidades atribuidas por muchas personas al mismo. Esta 
opinión se produce primero respecto del grupo prejuiciado y después 
incorpora al individuo.
Los
 profesionales sociales, por muy abiertos de mente que seamos, antes que
 profesionales somos personas, y debemos tener cuidado en este aspecto. 
En nuestro quehacer diario trabajamos con numerosos colectivos, de 
algunos sabemos más y de otros menos, y es precisamente esta carencia de
 información la que fundamenta en muchos casos el prejuicio en sí. 
También es cierto que hay otro tipo de perjuicios provenientes de 
opiniones estrictamente personales al conocer el tema, pero debemos 
saber diferenciar entre el criterio personal y profesional.
Una 
atención de calidad requiere que tratemos a las personas como tales, con
 sus derechos reconocidos que debemos hacer prevalecer. Un ejemplo de 
ello: un trabajador social puede pensar que el aborto es un asesinato, 
pero su deber y obligación es reconocer y aceptar si ningún tipo de 
miramiento a una usuaria que este barajando esa opción.
Ser 
conscientes de nuestras limitaciones es el mejor arma para no caer en 
este tipo de errores ya que nunca se puede solucionar un error si no nos
 creemos capaz de caer en el. En un curso me comentaban con gran razón 
que trabajar con las personas es dar parte de tu personalidad a quien 
estas atendiendo. Puestos a dar ofrezcamos los mejor de nosotros mismos 
dejando a un lado estos prejuicios que como cualquier persona tenemos.
Os dejo un gran video que destaca el papel negativo de los prejuicios 
frente a la pobreza, y como nos sirven de excusa para tener la 
conciencia tranquila frente al drama de las personas que viven en la 
calle.
No hay comentarios:
Publicar un comentario